El calzado es un factor de riesgo importante en el desarrollo del pie diabético, pero es un factor controlable. El calzado es la protección de los pies, que son las extremidades del cuerpo que mas se exponen a traumatismos. Los traumatismos pueden ser un problema cuando se tiene diabetes.
El calzado adecuado es parte integral de la prevención en el desarrollo del pie diabético, especialmente en presencia de neuropatía diabética.
El calzado del diabético debe ser ergonómico y protector, esto que significa:
- Debe ser un calzado que cuando camine, se sienta cómodo
- Que no produzca callos
- Que no caliente excesivamente el pie, que transpire
- Que se sienta ajustado como un guante, pero que no moleste
- Que sea suave por dentro, de tal manera que no tenta puntos de contactos abrasivos
- Que se sea flexible
- Que otorgue una pisada firme en todo el pie
- Que se amortiguador
- Que la suela no seda al peso fácilmente y logre distribuir el peso del pie uniformemente, evitando zonas de mayor presión.
- Debe ser protector, amortiguar a los golpes
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